Bombilla de luz: una bombilla de luz común y corriente puede ser utilizada como artefacto incendiario. Utilizando un taladro de alta velocidad se hace un pequeño orificio en una bombilla común, sin dañar los filamentos dentro de la bombilla. Con una jeringuilla se inyecta gasolina dentro de la bombilla y se sella el orificio con pegamento. Luego se coloca la bombilla en un receptáculo asegurándose que el interruptor este en posición apagada. Un fuego explosivo resultará al encender la luz.